7 Festival Universitario Eureka. Foco Animación: Reflejos Imaginarios
Crítica de No Signal (2014), de Katharina Huber
Por Sergio Andrés Canedo Levy
@sergio_canedo_l
La obra No Signal de Katharina Huber tiene un diseño muy simple pero adecuado y muy bien trabajado en cada trazo. La forma de animar al protagonista y jugar con el único escenario logra cautivar tu atención en todo momento y hacerte sentir envuelto por el mismo.
En la obra se pueden identificar muchas emociones e intentar descifrar muchas otras, como la nostalgia, el aburrimiento, la desesperación, el dolor, y las ganas de cambiar las cosas, pero tener que vencer al miedo y salir de la zona de confort para ello. En cada fotograma, se ve al protagonista encerrado en su habitación, luchando contra sus sentimientos, pensamientos, emociones y la rutina. También, al final, logra enfrentar al mundo exterior y se ve rodeado de personas iguales a él y con el mismo propósito.

Percibo la obra como una expresión interna de la autora y un reflejo de lo que todos nosotros enfrentamos en nuestro día a día de distintas maneras. Una forma fresca y original de expresar esto que es tan natural, algo por lo que todos pasamos en algún momento de nuestras vidas. Y leer el título, que significa “sin señal” en su traducción al español, hace pensar que los problemas a los que se enfrenta el personaje se deben a la ansiedad de no tener comunicación con el mundo virtual al que estamos tan acostumbrados. Esta es una obra que tiene muchas aristas en las que uno puede detenerse para analizarlas e intentar comprenderlas y reflejarlas en su propio vivir.